Cocinar con niños es matemáticas, química, nutrición y una diversión deliciosa que une a todos. El más pequeño puede verter la taza en el tazón, y el mayor puede darse cuenta de que dos medias tazas equivalen a una taza entera. Una niña de 3 años puede ser quisquillosa para comer, pero cuando cultiva algo en el jardín y luego lo cocina y lo sirve, la curiosidad la domina y quiere probar lo que hemos preparado.
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En octubre, los proveedores de cuidado infantil se enfrentarán a la dura realidad del aumento de los costos de los alimentos y la reducción de los reembolsos. El nuevo proyecto de ley del CACFP incluye disposiciones clave que los defensores han solicitado desde hace tiempo y que podrían marcar la diferencia entre que los niños pasen hambre y estén sanos.