Si los padres no pueden encontrar un cuidado infantil seguro, asequible y de calidad, no podrán volver a trabajar. Solo en el condado de Greenville hay casi 75,000 estudiantes en edad escolar y 36,000 niños en edad preescolar y bebés. Si no se toman medidas inmediatas para garantizar que los proveedores actuales tengan los recursos necesarios para permanecer abiertos y que los nuevos proveedores puedan abrir rápidamente, muchos padres verán sus opciones de cuidado infantil muy limitadas.